Después de China confirmara que por primera vez en 2020 no tuvo nuevos contagiados por coronavirus Covid-19, algunos analistas empiezan cómo este país se puede recuperar económicamente de esta crisis.
Ante la tremenda volatilidad de los activos financieros , cuando pase la tormenta quienes se hayan defendido con activos reales, saldrán mejor parados.
Un análisis exclusivo de Newmark Knight Frank (NKF) reporta los posibles impactos económicos por sector y brinda importantes recomendaciones de valor agregado para empresarios e inquilinos.
Una situación inusual, requiere medidas inusuales. La afectación de la oferta y la demanda de bienes y servicios en toda la región por el COVID-19 ha desembocado en medidas tomadas por los gobiernos de la región.
La suma de la histeria de los mercados más la realidad de la desaceleración económica pausa la inversión en inmuebles y retrasa ocupación de espacios ya construidos.
La industria inmobiliaria, en términos generales, tiene un ciclo de negocios más pausado y es probable que los efectos del COVID-19 no se reflejen tan rápido como en otros sectores de la economía nacional, como es el caso del turismo.
La pandemia del COVID-19, ha sido especialmente severa en sectores como el de Real Estate, en virtud de la clara desaceleración del turismo y de la inversión.
A medida que las empresas se enfrentan a esta crisis de salud global, están cambiando los modelos de análisis de riesgos para proteger su activo más importante: su gente.
En la medida que el COVID-19 impacta a más personas todos los días, la planificación de contingencia de coronavirus es de suma importancia. Explore los posibles efectos de la pandemia en la economía, los sectores inmobiliarios y los inversores y usuarios.