Se espera que los espacios comunes o colaborativos demuestren una estructura más personalizada y con mayores normativas higiénicas, dando paso a una interacción y experiencia controlada.
Los inversores y los propietarios de viviendas aún se preparaban para lo peor cuando quedó claro que el covid-19 empujaría a la economía mundial a su recesión más profunda desde la Depresión de la década de 1930.
Adaptaciones deberán estar pensadas en establecer espacios que permitan a los colaboradores sentirse seguros.
Ampliar el teletrabajo a la mayoría de sus empleados e incorporar fuertes protocolos sanitarios en sus instalaciones ha dado resultados muy positivos durante los últimos meses.
Regresar a las edificaciones corporativas deberá hacerse de manera paulatina para poder el distanciamiento social.
Regreso implicará capacitación e inversiones en protocolos de higiene y limpieza