Actualmente, pymes, consultores independientes, empresas locales y multinacionales buscan opciones que se ajusten a sus necesidades y les permitan la continuidad del negocio, sobre todo por la afectación sufrida a raíz del COVID-19.
El COVID-19 ha reestructurado el comportamiento social y ha impactado la vida diaria de una manera nunca vista; los distritos comerciales, las calles principales, los restaurantes y los centros de entretenimiento urbano de todo el mundo han estado cerrados durante meses, y la crisis ha obligado a la industria a girar de manera extraordinaria.
Con la desaparición de los puestos fijos en muchas oficinas, la creciente apuesta por un horario flexible y un mayor uso de la tecnología para conectar equipos, modelos como Hub & Club se están volviendo más viables y atractivos.
Las personas son la única constante en épocas de cambios radicales. Esta confluencia histórica de cambio indica que, debemos reconsiderar y reinventar la manera en que las personas experimentan cada aspecto de sus vidas y espacios donde viven.